Estimados estudiantes-militantes de Pan y Rosas, Oktubre (ambas juventudes del P.T.S.) y El Yunque (P.O.):
Antes que nada, deseaba felicitarlos. ¡Muy buen trabajo! ¡Trotsky estaría sonriendo –y eso que para sacarle una mueca que aparentara una sonrisa a Trotsky había que llamarle, poco más, a Los Midachis-! ¡Son re grosos!
Deseaba, primero que nada y luego de esta introducción desestructurada y rimbombante para “meterle onda” a la política universitaria y ganarme una buena primera impresión a ustedes –no veo una mejor forma que a través de alabanzas desestructuradas-, hablar de los traidores de la clase estudiantil. En otras palabras, aquellos sectores facciosos, autoritarios, personalistas, pejotistas, invertidos y demás calificativos que le pueden caber a estos sectores facciosos, autoritarios, personalistas, pejotistas, invertidos. No me voy a referir, de más está decirlo, a la agrupación que preside el Centro de Estudiantes, sino a quienes, por fuera de las instituciones de gobierno estudiantil, han llevado a la Asamblea Estudiantil del día 12/05/2011 a una palpable desnaturalización y boicot democrático. No hablo de otro sector más que del rosquero FUNyP., también conocidos como “LOS K” (utilizo las mayúsculas en referencia a una pegatina de las agrupaciones que se identifican con laJuventud del P.T.S., en la que denuncian a los gritos –puesto que el uso de mayúsculas demuestra exacerbación de ánimos- lo que hemos venido señalando anteriormente, es decir, el manejo desnaturalizado y el boicot democrático de La Asamblea Estudiantil). Es bien sabido por todos los que estamos del lado de los estudiantes, que el rosquero Frente Universitario Nacional y Popular (mejor sería llamarlo “Frente Universitario Explotador de las Clases Subalternas y Continuador de un Modelo Excluyente que lo Único que Consigue es la Profundización del Más Salvaje Capitalismo, Escondido tras un Velo o Máscara Ilusoria de un Reformismo Barato” o “FUECSCMEUCPMSCEVMIRB”) es manejado por un grupo reducido u oligarquía pejotista que, no sólo ha demostrado a través de sus miembros ninguna clase de arraigo o interés por el estudiantado, sino que además moviliza a sectores ajenos a la comunidad universitaria para hacer efectiva e impositiva su posición. Por esta razón, he de informarles de los acontecimientos que sucedieron ese día y que nadie vio a excepción de un grupo de valientes camaradas:
Durante la tarde del 12 de mayo del presente año, en una esquina de la U.N.G.S. había una importante cantidad de micros que transportaban a personas ajenas a la comunidad universitaria. Fuentes importantes de mi agrupación me señalaron que, al momento de preguntarle a los choferes de dichos micros que estaban estacionados qué era lo que hacía gente ajena a la Universidad entrando como por su casa, ellos les respondieron que “cierren la boca, que acá está la C.G.T. metida. Moyano nos mandó a que apoyemos al FUNyP que necesita un triunfo urgente sobre las fuerzas de la izquierda. Lo único que hacemos es cagar a los marxistas trayendo gente de barrios carenciados a través de los punteros políticos –así como la novela del 13- a que apoyen y alienten a los compañeros y que la compañera Cristina sea electa y ponga a un empresario enquistado en la burocracia sindical como vicepresidente y posterior continuador de este modelo excluyente y mentiroso”. Sin lugar a dudas, el chofer del micro había hablado de más. Quizás lo hizo porque estaba seguro de que, finalmente, el proletariado universitario había sido cooptado. Lo que ellos no saben –dado su ignorancia o mala fe- es que está científicamente comprobada la necesidad de la dictadura del proletariado. Es indudable que ésta llegará y todos los traidores a la causa de los estudiantes y los demás enemigos de clase serán exterminados para siempre. Como les venía diciendo, los testimonios de mis compañeros representan una fuente irreprochable sobre la acción fraudulenta encabezada por estos degenerados traidores a la causa de los estudiantes, en complicidad con La Mecha.
Por este motivo, la actitud sostenida por ustedes, camaradas, durante la Asamblea, violentando la situación hasta límites insospechados e impropios para cuadros intelectuales, queda completamente justificada. Incluso la violencia que encabezaron en los días posteriores y la decisión de tomar el Consejo Superior desoyendo la voluntad de una asamblea ilegítima. A los que les señalan que, al no romper la Asamblea antes de perder, su actual actitud es propia de quinceañeras histéricas que sólo se quejan porque, justamente, “perdieron”, les respondo: los estudiantes de las agrupaciones de izquierda nunca perdemos. En caso de salir desfavorecidos en una votación, es siempre consecuencia del manejo fraudulento propio de las prácticas del P.J.
A los que señalan que las agrupaciones de izquierda son facciosas y agreden a los estudiantes independientes acusándolos de kirchneristas, siéndolo o no, les respondo: los estudiantes de las agrupaciones de izquierda creemos que los requisitos para ser estudiante son pertenecer a la comunidad universitaria y ser trotskista o, al menos, simpatizar con el trotskismo; además, ir en contra de los deseos de las agrupaciones de izquierda implica necesariamente (dado la lógica binaria que domina todos nuestros análisis políticos) estar comprado por el gobierno burgués.
A los que les señalan que a la Reforma Universitaria se le han agregado puntos que se han debatido previamente y que los estudiantes en Asamblea apoyaron la decisión de ir por algunas mejoras ahora antes de pelear por todo de una y no ganar nada, les respondo: dado que nuestro análisis político se funda en la premisa del “cuanto peor, mejor”, esas pocas mejoras lo único que consiguen es dormir a la bestia revolucionaria que descansa en la corporación estudiantil. De la misma manera, repito que no nos importa la decisión de los estudiantes dado que consideramos a la Asamblea ilegítima, puesto que de haberse llevado a cabo en circunstancias normales, nosotros, los estudiantes de las agrupaciones de izquierda, hubiéramos ganado por goleada.
Y sí, muchachos, ahora que vino el kirchnerismo a la universidad tenemos que estar muy alerta. Ellos, respaldándose en sus sonrisas coquetas y sus películas nacionalistas – ¡pura propaganda fascista!-, en realidad no son otra cosa que burgueses asesinos y explotadores. Estudiantes, no se dejen engañar por la propaganda política de estos pichones de Stalin. La mejor forma de terminar con esa mentira filo-fascista es señalando con el dedo índice –ése de las acusaciones- todo lo que ellos hacen mal o lo que habrían hecho mal o lo que habrán de hacer mal. Después de todo, dado que son enemigos de clase y nosotros somos siempre los buenos, ellos, necesariamente, son siempre los malos.
Les mando un afectuoso saludo. Me gustaría seguir escribiendo, pero el deber revolucionario me llama.
Néstor Jorge Bronstein
Agrupación Estudiantil Grigori Zinóviev
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