29 jun 2011

La Mettrie y el marqués de Sade

Julien Offroy de La Mettrie nació en la ciudad francesa de Saint-Malo en 1709. Hijo de una familia de comerciantes, realizó estudios humanísticos completados más tarde con los de medicina. Sus ganas de saber y su avidez por la aventura, pronto lo llevaron lejos de su tierra natal. Primero a París y luego a tierras flamenca; algunas veces, incluso, huyendo de los que pensaban que sus ideas eran demasiado avanzadas para la época. La Mettrie fue sin duda el materialista más convencido y más radical de su generación. Sus escritos no fueron gratos a las mentes bien pensantes del momento, que los quemaron públicamente en 1746.
Debido a la inquina que La Mettrie provocaba entre teólogos y enemigos declarados del progreso del conocimiento, despertó la admiración de Federico II de Prusia, que le llamó en 1748 a Berlín para que fuera su lector y consejero. El papel que asumió La Mettrie en la corte berlinesa encendió los celos de Voltaire, quien no por ello dejó de lamentar su muerte cuando ésta se produjo en 1751. Y es que La Mettrie dejaba tras de sí una serie de obras, de entre las que sin duda destaca por la trascendencia que ha tenido a lo largo de los siglos posteriores El Hombre Máquina, en la cual rechaza de plano tanto el dualismo cartesiano como su concepción de la materia.

26 jun 2011

Tercera carta de la Grigori Zinóviev a los estudiantes de la U.N.G.S.

Estimados camaradas del Frente de Izquierda y los Trabajadores:

El motivo de esta carta difiere materialmente de las anteriores. En esta ocasión no me encuentro animado por el jolgorio (a decir verdad, nunca lo estoy, pues ello implica una relajación de los músculos, siempre tensos a la espera del salto cualitativo que implica el momento revolucionario), sino más bien ofendido. Nuestros enemigos de clase, las autoridades de la Universidad Nacional General Sarmiento (U.N.G.S.) han planteado la resolución de un nuevo documento de Reforma del Estatuto Universitario en una pequeña mesa de negociaciones y a la espalda de toda la comunidad universitaria.

20 jun 2011

Anécdota de colectivo: "El mejor lugar..."

Tomé el 303 una tarde con el objetivo de volverme a mi casa luego de haber terminado el día en el colegio. Contaba, si no me equivoco, con unos 15 ó 16 años. Supongo, de cualquier forma, que este último es un dato irrelevante. ¿Qué importancia puede guardar tan sólo un año de diferencia cuando han transcurrido tantos eventos en la cotidianeidad de mi vida? Además, el uniforme escolar hace que todos esos años  sean o parezcan monótonos entre sí. Es como período homogéneo.

Entrevista de trabajo: "Yo bajaría línea en mis clases"

Director: Buen día, caballero. Tome asiento, por favor.
Yo: Muchas gracias. ¿Le podría pedir un vasito de agua? Sucede que salí de mi casa algo sediento y esta sed se está haciendo insoportable a estas alturas de la jornada.
Director: ¡Cómo no! (sirve el vaso con agua). Bueno, recibí su currículum vitae y debo decirle que me encuentro muy impresionado.
Yo: Muchas gracias. Me he esforzado en hacerlo impresionante.
Director: Bueno, como sabe hay una vacante para profesor de Historia debido a que la actual docente se encuentra de licencia.
Yo: Sí. Me enteré. Es terrible lo que le sucedió.
Director: El tener un bebé es siempre una situación complicada para una madre. Bueno, como le estaba diciendo, dicha vacante estará disponible por unos meses.
Yo: (en tono emocionado) ¿Y quiere asignármela a mí?
Director: Es probable; pero antes que nada debo hacerle algunas preguntas. Verá, en esta institución tan ejemplar deseamos mantener determinada línea.

19 jun 2011

Plagio a Artaud o sobre cómo utilizar a un poeta maldito en la vida cotidiana

Mi amigo F… vino a visitarme el viernes por la mañana. Su estado era lamentable. Me explicó que deseaba terminar con su novia, pero no sabía bien la mejor forma de hacerlo o, aunque sea, hacérselo saber. Él está con ella desde los dieciséis años. Ahora tiene 28. Una gama de sentimientos contradictorios, ambiguos, se encuentran en su mente. La ama, pero no puede soportar verle la cara. No puede soportar más sus gustos para la decoración ni su forma de respirar cuando duerme. F… desea con desesperación un poco de libertad. Vino hacia mí en busca de auxilio, esperando que yo pudiera ofrecerle un poco de aire fresco en su hacinamiento intestino.
- ¿Qué puedo hacer para no volver  a ver más a esta mujer?
- Decile que ya fue - le respondí con tranquilidad.
- Ésa no es una opción. Ella es muy volátil.
- En ese caso, escribile una carta.
- Lo pensé. Lo que sucede es que no sé escribir bien. Soy un hombre de pocas pulgas para la literatura. ¿Podrías hacerla, me estoy refiriendo a la carta, por mí? – me sugirió, suplicante.
Quizás no fuera una mala opción. Sin lugar a dudas, tengo un poco más de práctica en el ámbito de la pluma que F…. No obstante, no deseaba quedar expuesto a ser descubierto por su novia, que conoce bien mi obra. Eso, sin mencionar mi falta de sensibilidad, es decir, mi total y completa frialdad en lo referido a asuntos amorosos. La angustia de mi amigo me hipnotizaba a la par de sus súplicas. Pero yo había tomado mi decisión:
- Lo siento, F…. Me es imposible. No me encuentro inspirado.
- ¿Y entonces qué hago?
Y recordé lo que hube leído la semana pasada.
- Toma una lapicera; yo te dictaré algo que, de seguro, ella no conoce.

Voltaire y la Inquisición

"Tras aquel terremoto que había destruido las tres cuartas partes de Lisboa, los sabios del país no habían hallado mejor método para prevenir el desastre total que ofrecerle al pueblo un hermoso auto de fe: la universidad de Coimbra había decidido que el espectáculo de algunas personas quemadas a fuego lento, con el gran ritual al uso, era el remedio infalible para que la tierra no temblase.

18 jun 2011

Entrevista de trabajo: "Soy un panóptico"

Director: Buen día, caballero. Siéntese, por favor. Póngase cómodo.
Yo: Muchas gracias, señor.
Director: ¿Usted envió su currículum vitae por el puesto vacante de preceptor, no es así?
Yo: Sí.
Director: ¿Usted sabe que generalmente los currículum están confeccionados con computadora o máquina de escribir, no es así? Se lo señalo esto porque el de usted fue hecho con lapicera, en hoja de cuaderno nº 5 cuadriculado, sin el borde recortado. Eso, obviando la mancha de zapatilla que exhibe, tan cálidamente, la hoja en su parte posterior.
Yo: Sí, ello lo sabía. Pero sucede que me enteré de la vacante muy sobre la hora y no tuve tiempo ni espacio para preparar un currículum con prolijidad. Supongo, de cualquier manera, que lo importante no es la presentación sino, más bien, el contenido.
Director: Eso, que no le quepa la menor duda. Sin embargo, es menester hacerle saber acerca de esta falta de prolijidad. En fin, vayamos directo a las preguntas sobre el contenido.
Yo: Me parece bien.
Director: Usted señala aquí que está cursando un profesorado universitario en Historia.
Yo: Correcto.
Director: Eso es perfecto. Verá, me interesa contratar a estudiantes de profesorados. La razón de ello es que deseo que luego, al momento de recibirse, sigan trabajando como educadores dentro de la institución.
Yo: Es una excelente idea. Sería como formar una gran familia.
Director: Aquí hay algo que me llama la atención. Debe ser que no comprendí su caligrafía. ¿Me puede decir qué es lo que escribió aquí?
Yo: ¡Cómo no! Dice “Panóptico”.

9 jun 2011

Juguemos

Creo que nadie es más revolucionario que un niño. Los niños juegan y al hacerlo crean su pequeño universo. A éste lo dominan a través de su voluntad, como los grandes dioses que pueden aplastar todo lo que está a su alcance -y lo que está a su alcance es todo-. Impolutos, viven en su pequeño mundo de fantasmas, haciendo y deshaciendo utopías y dándole cuerpo a relatos y delirantes proyecciones sobre el futuro.

(“…delirantes…”)

¿Pero son sus visiones realmente objeto del delirio? Quizás para quienes hemos sido educados a lo largo de nuestras vidas –más cortas, más largas- bajo los aspectos de la microfísica del poder, los sueños de los niños no nos parezcan más que la consecuencia de la falta de golpes de la realidad, que la falta de acostumbramiento a la cotidianeidad y la necesidad de proyectar a corto plazo. ¿Pero por ello es tan sólo un delirio? ¿O bien somos nosotros, los lunáticos que tomamos las calles todos los días para ir a quién sabe dónde a cumplir nuestras obligaciones con quién sabe quién, quienes pensamos así sólo para protegernos en las aristas del conformismo?
Los niños son los grandes revolucionarios porque juegan a crear el mundo. ¿Sería descabellado aprender un poco más de ellos para construir el nuestro?

(…)

Esto es sólo un delirio.

Segunda carta de la Grigori Zinóviev a los estudiantes de la U.N.G.S.

Estimados camaradas del Frente de Izquierda de los Trabajadores (F.I.T.):

En primer lugar, quería felicitarlos: ¡Muy buen trabajo! Su actitud unionista y frentista demuestra que las organizaciones que componen el arco de la izquierda argentina pueden parecer atomizadas y desperdigadas por doquier, sin ninguna clase de relación entre sí, pero a la hora de las grandes decisiones deciden unirse, sin importar si antes se consideraban traidoras de la causa de los trabajadores entre sí. ¡Son re-grosos! Si Lev Trotsky viviera, estaría aplaudiéndolos de pie, cual argentino en México en el año 1986, partido Inglaterra-Argentina y Diego Maradona gambeteándose a todo el equipo rival. Quizás, en tanto que somos internacionalistas, esto nos parezca banal – incluso podemos llenar de reproches a Maradona por su actitud egoísta, no definida previamente en una asamblea de jugadores, órgano soberano por excelencia. O que el Mundial de fútbol lo único que consigue es dividir a la clase trabajadora bajo otras categorías identitarias para ayudar a la dominación de la burguesía y la continuación de un modelo excluyente y salvaje –, pero eso no viene al caso. Es un ejemplo y ya de aplausos de pie.

5 jun 2011

Carta de la Grigori Zinoviev a los estudiantes de la U.N.G.S.

Estimados estudiantes-militantes de Pan y Rosas, Oktubre (ambas juventudes del P.T.S.) y El Yunque (P.O.):

Antes que nada, deseaba felicitarlos. ¡Muy buen trabajo! ¡Trotsky estaría sonriendo –y eso que para sacarle una mueca que aparentara una sonrisa a Trotsky había que llamarle, poco más, a Los Midachis-! ¡Son re grosos!
Deseaba, primero que nada y luego de esta introducción desestructurada y rimbombante para “meterle onda” a la política universitaria y ganarme una buena primera impresión a ustedes –no veo una mejor forma que a través de alabanzas desestructuradas-, hablar de los traidores de la clase estudiantil. En otras palabras, aquellos sectores facciosos, autoritarios, personalistas, pejotistas, invertidos y demás calificativos que le pueden caber a estos sectores facciosos, autoritarios, personalistas, pejotistas, invertidos. No me voy a referir, de más está decirlo, a la agrupación que preside el Centro de Estudiantes, sino a quienes, por fuera de las instituciones de gobierno estudiantil, han llevado a la Asamblea Estudiantil del día 12/05/2011 a una palpable desnaturalización y boicot democrático.  No hablo de otro sector más que del rosquero FUNyP., también conocidos como “LOS K” (utilizo las mayúsculas en referencia a una pegatina de las agrupaciones que se identifican con laJuventud del P.T.S., en la que denuncian a los gritos –puesto que el uso de mayúsculas demuestra exacerbación de ánimos- lo que hemos venido señalando anteriormente, es decir, el manejo desnaturalizado y el boicot democrático de La Asamblea Estudiantil). Es bien sabido por todos los que estamos del lado de los estudiantes, que el rosquero Frente Universitario Nacional y Popular (mejor sería llamarlo “Frente Universitario Explotador de las Clases Subalternas y Continuador de un Modelo Excluyente que lo Único que Consigue es la Profundización del Más Salvaje Capitalismo, Escondido tras un Velo o Máscara Ilusoria de un Reformismo Barato” o “FUECSCMEUCPMSCEVMIRB”)  es manejado por un grupo reducido u oligarquía pejotista que, no sólo ha demostrado a través de sus miembros ninguna clase de arraigo o interés por el estudiantado, sino que además moviliza a sectores ajenos a la comunidad universitaria para hacer efectiva e impositiva su posición. Por esta razón, he de informarles de los acontecimientos que sucedieron ese día y que nadie vio a excepción de un grupo de valientes camaradas: